A PROPÓSICO DE LAS PROTESTAS EN EEUU*
Estaba
reflexionando sobre las protestas del pueblo gringo, a partir de una fotografía
que vi con la expresión *I can't breath (No puedo respirar)* en la fachada de
un banco. Y es que el video de la muerte de Floyd no es más alarmante que otros
anteriores.
Además, algo
que llama la atención de las manifestaciones, a diferencia de las precedentes,
es el volumen de personas de piel blanca que, en algunas ciudades, igualan o
superan la cantidad de personas de piel negra que manifiestan.
La
generalización de las protestas y el uso de la frase *No puedo respirar* puede
interpretarse a nivel simbólico, porque no solo se explica por el hartazgo o
necesidad de justicia por la muerte de Floyd y los más de 1000 afroamericanos
asesinados por las "fuerzas del órden".
Es una
sociedad que *No puede respirar* por el sistema que le oprime. Son los 50
millones de "homeless" que antes de la pandemia estaban fuera de toda
estructura social, comercial, financiera e institucional que *no pueden
respirar*.
Son los más
de 30 millones que se quedaron sin empleo durante la pandemia los que *no
pueden respirar* Son los más de millón y medio de contagiados y los que no se
atienden los que *no pueden respirar*
Son los más
de 100.000 muertos por la gestión Trump del Covid19 que ya *no respiran*.
Son las
millones de personas que serán tiradas a la calle en las ejecuciones hipotecarias
en marcha tras la apertura de la cuarentena las que *no pueden respirar*
Entonces,
como si activara una conciencia dormida, el video del asesinato de Floyd
condensa la asfixia y muerte de la sociedad producto de la opresión del sistema
de poder dominado por hombres americanos blancos protestantes-sionistas
(WAPS).
El *No puedo
respirar* representa la súplica del oprimido ante un sistema que le asfixia
como si no fuera nadie, como si no valiera nada, tal como se refleja en la
expresión del policía criminal que durante el asesinato de un ser humano mete
las manos en el bolsillo y mira alrededor con tranquilidad, como si de un acto
rutinario se tratara, como si fuera su cotidianidad, como quien está haciendo
algo a lo que ya está acostumbrado. No hay en el asesino ninguna expresión
afectiva, ni de rabia ni de odio ni de temor. No, se le ve muy natural haciendo
esa opresión (asfixia) como la que hace Trump, pero más allá de él, todo un
sistema criminal sustentado por la fuerza del miedo y de las armas.
Entonces, se
ven unas manifestaciones en la que protesta una buena parte de la sociedad
americana que *no puede respirar*, una sociedad completa, en la que, por
supuesto mueren literal y socialmente más los negros, pero también los blancos
pobres excluidos del circuito de poder del hombre rico-poderoso blanco que
simboliza el policía asesino.
Isaliv Matheus S.
Psicóloga
junio 1, 2020
Comentarios
Publicar un comentario